TALLER DE ESCRITURA

Taller de relato: Relojes

¡Hola, amante de las palabras!

Espero que tengas tiempo para la propuesta de hoy, ¡porque la cosa va de relojes! 😀

Aquí van cinco propuestas para que puedas armar tu relato con precisión relojera:

  1. Escribe un microcuento de un máximo de 50 palabras que empiece con la siguiente frase: «Se paró el reloj». 
  2. Desarrolla un relato de un máximo de 728 palabras, protagonizado por un reloj que protesta por no disponer de suficiente tiempo.
  3. Redacta una historia en 24 frases, una sobre cada hora del día.
  4. Escribe un cuento de un máximo de 2000 palabras en el que aparezca una habitación llena de relojes que marcan distintas horas.
  5. Crea un relato de la extensión que quieras en el que tu protagonista sea un extraterrestre que vive en un planeta sin tiempo. ¿Cómo reacciona al llegar a la Tierra?

Si quieres, puedes mandarme tus creaciones (o compartir el enlace a las mismas) a través del siguiente formulario. Si me das tu consentimiento, las compartiré en el blog a través de una sección que crearé para tal fin. Por supuesto, también eres libre de usar la sección de comentarios de este artículo.

 

 

CONSEJOS DE ESCRITURA

Ejercicio de escritura: Tu fin de semana ideal

¡Hola, amante de las palabras! 😀

Hoy te traigo un nuevo ejercicio de escritura va a despertar tus cinco sentidos y que te va a hacer desear (más aún) que el fin de semana llegue cuanto antes. 

Mi propuesta es que pienses en qué forma tiene tu fin de semana ideal: ¿es redondo? ¿cuadrangular? ¿piramidal? ¿rocambolesco y helicoidal? 

¿Qué olores tiene? Tal vez tenga aroma de lavanda, o de papel de periódico y café recién salido de la cafetera. Quizá tenga un sabor frío, o una textura cálida y hogareña. Puede que sea reposado y abullonado, o quizá esté agitado y aproveche cada minuto. O puede que sea todo eso y más, que para eso es tu fin de semana ideal. ¡Tú decides! 😀 

Si quieres, puedes compartir tus hallazgos conmigo a través del siguiente formulario (todas las casillas son opcionales, excepto la correspondiente al nombre). Si me das tu consentimiento, iré publicándolos poco a poco en el blog a través de una página que crearé para dicho fin. 

¡Feliz palabreo!

LITERATURA INFANTIL Y JUVENIL, MISCELÁNEA, RESEÑAS

30 libros para niños de todas las edades

¡Hola, amante de las palabras! 🙂

Hoy tengo un regalito para ti. La idea de crearlo surgió hace unos meses, cuando La Madre Tigre, cuyo blog aprovecho para recomendarte, me pidió una lista de recomendaciones literarias para sus hijas. Rauda y veloz me metí en faena, porque adoro la literatura para niños y jóvenes, y le mandé por correo mis sugerencias. 

Este fin de semana, por fin, las he pasado a limpio y las he ordenado de tal manera que tú también las puedas disfrutar. Dentro de mi selección hay 30 títulos de distintos países y épocas, dirigidos tanto a los más peques como a adolescentes (pinchando en el enlace correspondiente a cada uno de ellos podrás acceder a su descripción en Amazon, así como comprarlo a través de dicha plataforma si lo deseas). 

Sea como sea, estoy segura de que disfrutarás de los mismos tengas la edad que tengas, y de que si tienes hijos podrás compartir un buen rato con ellos hablando de los personajes que habitan cada historia. 

Sin más dilación, aquí puedes descargarte el PDF con mi lista de 30 libros infantiles y juveniles para niños de todas las edades. ¡Que lo disfrutes! 🙂

Posdata: Tengo curiosidad por saber cuáles fueron las lecturas que más te marcaron cuando todavía podías expresar tu edad con los dedos de ambas manos. Si te apetece, puedes contestar a esta cuestión rellenando el formulario que viene a continuación. ¡Gracias! 

 

TALLER DE ESCRITURA

Taller de escritura: Entrevista a una fruta

¡Hola, amante de las palabras!

La propuesta creativa de hoy viene fresca y colorida cual macedonia, así que haz acopio de vitaminas y pon en marcha los resortes de tu imaginación. 

Esta vez te sugiero que te transformes en periodista y prepares las preguntas de la entrevista que le realizarías a una fruta, así como las respuestas que esta te daría.

Me da igual que escojas una sandía, una granada o una chirimoya, ¡puedes elegir la que más te apetezca, y comértela cuando hayas terminado con el ejercicio! 😀

Por si necesitas un poco de ayuda para arrancar, aquí va un fragmento de la entrevista que he mantenido con un limón un tanto amargado:

Pregunta: Estimado señor limón, ¿tiene usted alguna enfermedad?

Respuesta: La verdad es que sí, padezco de acidez. Es por culpa de los huesecillos que pueblan mis rodajas.

Pregunta: ¿Le gusta su trabajo?

Respuesta: Pues oiga, no. A nadie le agrada ser exprimido para acabar después arrugado en una nevera solitaria.

Pregunta: Señor limón, le noto a usted un tanto sarcástico.

Respuesta: No es sarcasmo, es humor ácido.

Pregunta: Señor limón, ¿qué opina de las naranjas?

Respuesta: Que están sobrevaloradas. No paran de contratarlas para el tema de los zumos. Donde esté una limonada, que se quite lo demás.

 

TALLER DE ESCRITURA

Taller de escritura: Al escondite inglés

¡Hola, amante de las palabras!

Hoy te propongo que juguemos al escondite a través de la escritura, ¿te animas? Aquí te ofrezco 7 posibilidades para que escojas entre ellas o escribas la que a ti te apetezca.

  1. Redacta un microrrelato de 140 caracteres que incluya la palabra “escondite”.
  2. Escribe un relato de entre 300 y 500 palabras en el que aparezca el escondite más peculiar que puedas inventar.
  3. Narra en un máximo de 1000 palabras la historia de un objeto que lleva mucho tiempo escondido a modo de monólogo interior.
  4. Escribe un cuento (de la extensión que tú quieras) en el que tu protagonista deba esconder sus pensamientos.
  5. Desarrolla una historia en la que aparezca el juego del escondite pero con las reglas cambiadas.
  6. Imagina que tu personaje principal logra acceder a su subconsciente. ¿Qué es lo que encuentra ahí escondido? ¿De qué forma están representados los pensamientos y las emociones? Construye una narración con lo que se te haya ocurrido.
  7. Crea un relato que tenga lugar en un país oculto a los mapas.

¿Qué te parecen? ¿Te están entrando ganas de alborotar con tus ideas?

Si es así, arrebújate en tu sillón o sofá favorito, ¡y a darle vueltas a tu historia cual lavadora en pleno centrifugado! 🙂

¡Feliz palabreo!

CONSEJOS DE ESCRITURA

10 formas de llenar tu cuaderno de escritor

Me encantan los cuadernos. Es un vicio al que no me resisto, y a menudo les invento usos rocambolescos con tal de comprármelos, aunque luego, llevada por el caos y la entropía, los utilice cada día para algo distinto.

Por eso, cuando descubrí A Writer’s Notebook, de Ralph Fletcher, sentí una inmediata corriente de simpatía hacia el autor. Alguien que ama escribir a mano tiene muchas papeletas para ser una persona de bien. 😛

En su libro explica cómo los escritores, además de vivir la realidad, reaccionan ante ella, la conciben como una fuente de inspiración, y no se resisten a plasmar sus observaciones en el papel. Estas pueden ser de muchos tipos, pero a continuación te traigo las 10 categorías que él enumera:

Hechos o historias que te emocionan, sorprenden o afectan de algún modo

Hay personas que se sienten eufóricas en mitad de un festival de rock o que contemplan un cuadro en actitud compungida pero puede que a ti ambas situaciones te dejen indiferente. Cada persona es un mundo y precisamente por eso es bueno que prestes atención a aquellos temas que te remueven por dentro y a la razón particular por la que lo hacen.

Preguntas que despiertan tu curiosidad

¿De dónde venimos? ¿A dónde vamos? ¿Cuánto tiempo tiene que estar cociéndose un huevo en el cazo? ¿Qué pasaría si el cielo fuese verde y la hierba azul? ¿Cuántas hormigas hay trabajando a la vez en un hormiguero? Las preguntas nos activan, nos convierten en exploradores de una vida llena de interrogantes grandes y pequeños. ¿Qué te preguntas tú?

Detalles, detalles everywhere

 ¡Ay, los detalles! Prestarles atención es como ver la vida en alta definición, y te permite darte cuenta de que hay tanto entretenimiento en una tarde en la playa como en las filigranas de una taza de café. Todo depende del observador, como diría Heisenberg con su principio de incertidumbre. Además, los detalles son evocadores: ese abrigo al rojo al que le faltaba un botón, esa estantería que parecía verde cuando le daba el sol… Ser preciso te permite imaginar con mayor nitidez. 

Semillas de ideas

En un cuaderno también se pueden guardar ideas para historias, o elementos aleatorios que pudieran dar lugar a las mismas. Por ejemplo, imagínate que ves una nube con forma de llave. Es una imagen al azar, pero puede dar lugar a un cuento sobre un grupo de nubes que adoptan formas distintas para transmitirle un mensaje en clave al protagonista, o sobre una nube que sin querer resuelve un misterio. ¡Tú guarda la idea y tu creatividad pondrá el resto cuando toque!

Fotografías mentales

 Es un poco lo mismo que prestar atención al detalle, pero más sensorial si cabe. A veces hay escenas que te gustaría grabar con los cinco sentidos. Por eso está bien poder apuntar unas pocas palabras clave que luego te permitan desarrollar lo experimentado con más lujo de detalles. Si las quieres enriquecer más todavía, puedes recurrir a los símiles: «eso suena como…», «eso se parece a…». Por ejemplo, podrías escribir que “sus dedos de los pies parecían un grupo de percebes indefensos” o que “ su voz sonaba como un Pikachu al que le hubieran pisado la cola”.

Conversaciones

Si te va el cotilleo (y si no también) una gran idea es pescar fragmentos de diálogo en supermercados, cafeterías, cines, el autobús… A veces la gente te sorprende con comentarios de lo más inverosímiles (mientras no te sorprensa espiando…). Esto viene de perlas para la caracterización de personajes.

Listas

Sé que hay gente que es muy fan de esta modalidad, y no solo los creadores de catálogos. Los hay que enumeran sus lecturas y películas favoritas, lo que tienen que comprar en el súper… Lo bueno de las listas es que gracias a ellas puedes acceder a lugares olvidados de tu memoria. Por ejemplo, si te pido que recuerdes 25 juguetes que te entretenían en la infancia es probable que te venga a la mente alguno del que no te acordabas desde hace años. Al final, las listas encarrilan las ideas, las obligan a concentrarse en cierto punto como si fueran moléculas de aire comprimidas por una jeringuilla.

Recuerdos

 La memoria guarda cajas y cajas en su trastero, y no viene mal abrirlas de vez en cuando para ver lo que esconden, ni es mala idea escribir sobre ello después

Diario personal o cartas

 Tus pensamientos también pueden ir en este cuaderno, si te apetece. ¿Y quién dijo que todas las cartas han de ser mandadas, o que hay que escribir a destinatarios reales? Sea como desahogo o como forma de escarbar en tu mollera en busca de ideas inspiradoras, te recomiendo darle una oportunidad a este apartado. 🙂 ¡Nunca se sabe cuándo se habrá de convertir en material literario!

Palabras escritas por otros

Frases de grandes pensadores, fragmentos de novelas, de cuentos, de poemas, de canciones, de películas… Todo eso puede ir incorporado a tu cuaderno y enriquecerlo. Será un buen contrapunto de tus propias anotaciones, como si distintas voces estuvieran hablando sobre el papel.

¿Qué te han parecido estas 10 maneras de llenar un cuaderno de escritor o escritora? En el artículo del próximo domingo te contaré qué hacer con ellas una vez están escritas.

¡Feliz palabreo!

VIDA CREATIVA

Tu «yo» del espejo

¡Hola, amante de las palabras!

Hoy quiero hacerte una propuesta que dé rienda suelta a tu creatividad, y se me ha ocurrido que describas al personaje que habita al otro lado del espejo, ese que tanto se parece a ti… ¡Pero a la inversa!

Su nombre también es el tuyo del revés, y en su mundo todo está un poco patas arriba y los objetos funcionan de manera un poco enrevesada. Mi alter ego, por ejemplo, se llama Ediari (el reverso de Iraide) pero le gusta que la llamen E-Diary porque guarda sus pensamientos en un diario electrónico. 

Su blog se llama «Sitirbalap Aduga» y, en lugar de dar consejos de escritura y hacer propuestas creativas como hago yo en «Palabritis Aguda», le gusta proponer despropósitos y habla de todo lo que podrías estar haciendo en lugar de escribir. ¡Es una rebelde! 😉

Y tu alter ego, ¿cómo es? Para afinar tu descripción y dar rienda suelta a tu imaginación, te lanzo una serie de preguntas que podrías tener en consideración:

¿Con qué sueña? ¿Qué palabras le gustan? ¿Cómo es su casa? ¿Cómo viste? ¿Cómo se llama? ¿Qué aficiones tiene? ¿Cuál es su profesión? ¿Con quién vive? ¿Qué le hace reír? ¿Cuál es su relación contigo?

¡Feliz escritura! 🙂 

CONSEJOS DE ESCRITURA

3 lecciones clave de 2015

¡Hola, amante de las palabras!

Antes que nada, ¡feliz 2016! Espero que hayas tenido una magnífica entrada de año.

Por mi parte, estoy encantada de poder continuar palabreando junto a ti, y, para celebrarlo, quiero compartir contigo 3 lecciones que he aprendido a lo largo de 2015 y que pienso aplicar durante estos próximos doce meses.

El poder de la observación: Me encanta mirar a mi alrededor y darme cuenta de detalles cotidianos que podrían constituir el germen de un artículo, de un poema o de un relato.

Ha habido rachas en las que los he apuntado en un cuaderno, práctica que quiero afianzar porque me agrada mucho. A Writer’s Notebook, de Ralph Fletcher, fue el libro que me inspiró a llevarla a cabo. Hablaré de él con más profundidad en otro artículo.

La magia de crear una historia al día: Story A Day fue un reto divertido que me ayudó a generar y elaborar ideas a gran velocidad. Tener que escribir todos los días del mes de mayo el borrador de un cuento rebajó mi nivel de exigencia e hizo que acabara lo que había empezado y que las ocurrencias surgieran con más fluidez.

No todo lo que produje durante aquellos 31 días me gustó, pero hubo relatos con los que quedé muy contenta, y el hecho de que las consignas fueran muy variadas me ayudó a salir de mi zona de confort, por muy manida que suene esta expresión.

La necesidad de tener ideas en abundancia: Si me dices que escriba un relato sobre una casa, en seguida se me ocurrirán 100 maneras de abordarlo, pero de las 100 solo me convencerán 30 y como mucho 10 serán susceptibles de convertirse en una narración.

Con ello quiero decir que para crear textos originales es bueno ser exhaustivo en la búsqueda (con un límite, claro está, que si no nunca la daríamos por concluida), explorar un tema desde distintos puntos de vista y saber elegir aquellas ideas que sean jugosas y que den juego. 

Escribiré más a este respecto, pero de momento te aconsejo que leas este artículo sobre la importancia de tu brújula interior. Ella te indicará el camino a seguir.

¡Que 2016 nos salga tan palabrero como el año que le precede!

TALLER DE ESCRITURA

El juego de los 50 símiles

¡Hola, amante de las palabras!

Seguro que tú también estás hasta el gorro de oír frases de este tipo: «sus ojos eran negros como el carbón», «sus dientes eran blancos como perlas», «era largo como un día sin pan»…

De tan manidas pierden su encanto, ¿verdad? Las comparaciones son odiosas, sobre todo si se repiten como el ajo (otra expresión típica).

Por eso, hoy te propongo crear símiles un poco más originales que los que he mencionado. ¿Te animas?

Para ello, te voy a proponer 10 inicios, y tu misión es encontrar 5 finales… ¡Para cada uno de ellos! Así, lograrás un total de 50 comparaciones.

Es probable que al principio se te ocurran las respuestas más evidentes, pero después tendrás que estrujarte la mollera para dar con aquellas que se salgan del esquema habitual. ¿Qué te parece?

Aquí van mis principios:

  1. «Estaba tan mareado como…» (Sugerencia: «…el agua que se escurre por el desagüe»).
  2. «Estaba tan cansada como…» (Sugerencia: «…la suela de un zapato»)
  3. «Era tan lista como…» (Sugerencia: «…una bolsa biodegradable»)
  4. «Era tan valiente como…» (Sugerencia: «…la primavera en el Ártico»)
  5. «Era tan veloz como…» (Sugerencia: «…el gasto por Navidad»)
  6. «Era tan lento como…» (Sugerencia: «…la digestión del día de Año Nuevo»)
  7. «Era tan sonriente como…» (Sugerencia: «…una rodaja de sandía»)
  8. «Era tan despistada como…» (Sugerencia: «…un semáforo que no funciona»)
  9. «Era tan exigente como…» (Sugerencia: «…una señal de STOP»)
  10. «Era tan sorprendente como…» (Sugerencia: «…un día bisiesto»)

Si quieres, puedes escribir tus ocurrencias en la sección de comentarios.

¡Feliz palabreo! 😀

CONSEJOS DE ESCRITURA, NANOWRIMO

Mi experiencia con el NaNoWriMo 2015

¡Hola, amante de las palabras!

Antes que nada, pedirte disculpas por mi ausencia durante estas semanas. He pasado el mes de noviembre dando vueltas a distintos proyectos  y he descuidado la rutina semanal de escribir un artículo aquí. 

Además de eso, ¡he superado el reto del NaNoWriMo por segunda vez consecutiva! Estoy muy contenta, aunque he de reconocer que este año el proceso ha sido un poco raro. En lugar de escribir un número homogéneo de palabras por día, ha habido muchos días durante los cuales no he escrito nada, ¡y un par de días en los que he superado las 10.000 palabras (y he acabado con las muñecas hechas polvo)!

¿Por qué he escrito de esta manera?

Supongo que, por un lado, el NaNoWriMo ya no era una novedad para mí y, por ello, no me generaba tanto entusiasmo como en 2014.

Por otro, andaba barajando otros posibles proyectos y tenía ganas de dedicarme a mis otras aficiones (dibujar, hacer manualidades, tocar el piano…), así que no le he dado demasiada prioridad

Debo añadir que confiaba en mi capacidad de teclear a toda velocidad y cumplir el reto a tiempo. Además, me hacía ilusión saber cuántas palabras podía escribir en un día. 😀 

Por suerte, el contenido de la novela me motivaba lo suficiente para continuar, hasta el punto de que los dos días que no hice otra cosa que escribir me costaba despegarme del ordenador porque la narración me había absorbido por completo.

Writing frenzy

¿Qué he aprendido de la experiencia?

He descubierto que las prioridades varían. Puede que un año te encante tu historia y quieras dedicarte a ella en exclusiva durante el mes de noviembre, y que otro te pille con el ánimo más disperso y prefieras compaginarla con otros proyectos y hobbies.

Por otro lado, me he dado cuenta de que cada uno tiene su manera de organizarse y de que todas son perfectamente lícitas. Puedes escribir el borrador a pequeños incrementos y no fallar ni un día, o pegarte atracones cuando la fecha límite se acerca, y obtener el mismo resultado (la segunda opción es más difícil en la fase de revisión por el nivel de concentración que supone).

Para finalizar, he llegado a cuestionarme la necesidad de imponerme fechas límite para la consecución de un proyecto de escritura (o de cualquier otro tipo). Si bien te pueden servir de acicate para terminar una actividad que tenías aparcada, también pueden resultar agobiantes si en el camino surgen otras obligaciones u oportunidades con las que no habías contado.

Dicho esto, estoy muy contenta de haber vuelto a ser parte de la aventura «nanowrimera». 😀 

Y tú, ¿has participado este año? ¿Has llegado a las 50.000 palabras? ¿Qué has sacado de la experiencia? ¡Estaré encantada de leer tus comentarios!